En las actividades artísticas, tanto las emociones como la motivación juegan un papel fundamental, ya que se trata de un trabajo físico y mentalmente exigente. Pero es crucial aprender a diferenciarlas para entender mejor cómo influyen en nuestro rendimiento.
Diferencias clave entre Motivación y Emoción
Motivación | Emoción |
---|---|
Dirigida hacia un objetivo | Dirigida hacia la persona que la siente |
Se desarrolla lentamente | Se forma rápidamente |
Respuesta a estímulos internos | Respuesta a estímulos externos |
Como indican López de la Llave y Pérez-Llantada (2021) en su obra Psicología y Artes Escénicas, es importante saber distinguir entre estas dos fuerzas que influyen en nuestro comportamiento diario.
¿Motivación intrínseca o extrínseca? ¿Cuál es más importante?
Cuando damos un comentario positivo a un alumno por hacer algo que le pedimos, estamos creando lo que se conoce como motivación extrínseca. Aquí, el refuerzo externo —como el elogio— actúa como recompensa para que el comportamiento se repita.
Esta forma de motivación es útil, especialmente en los primeros momentos del aprendizaje artístico, ya que ayuda a que el estudiante se adhiera a la actividad. Sin embargo, a medida que avanza, será necesario desarrollar un interés genuino en la actividad.
Por otro lado, la motivación intrínseca surge del propio interés de la persona, independientemente de las recompensas externas. Deci y Ryan, en su teoría de la autodeterminación, explican que este tipo de motivación es clave para que una actividad se prolongue en el tiempo y se convierta en algo significativo para el individuo.
En las profesiones artísticas, tanto los aplausos del público como el salario son ejemplos de motivación extrínseca, pero la verdadera pasión por el arte —esa que nos lleva a practicar y mejorar constantemente— proviene de la motivación intrínseca.
¿Por qué es importante reflexionar sobre nuestras motivaciones?
Para mejorar en cualquier disciplina artística, el estudio y la dedicación nunca terminan. No se trata solo de practicar, sino también de aprender más sobre las obras que interpretamos, los compositores y las nuevas herramientas pedagógicas o psicológicas.
Dado que el arte es una carrera de fondo, es fundamental cuestionar de dónde provienen nuestras motivaciones. ¿Están alineadas con lo que realmente queremos, o se basan en expectativas ajenas? Algunas preguntas útiles para reflexionar incluyen:
- ¿Estoy haciendo esto porque realmente me apasiona o porque a mis padres les gustaba que lo hiciera?
- ¿Estudio para mejorar personalmente o solo para impresionar a mi profesor?
- ¿Es el éxito económico lo que me motiva o mi desarrollo personal?
Solo cuestionándonos de esta manera podremos alinear nuestros objetivos con nuestras motivaciones reales, algo esencial para no rendirnos en momentos difíciles.
Cómo mantener la motivación en los momentos difíciles
La potencia de una motivación personal y bien alineada es mucho mayor que la que podemos obtener de recompensas externas. Aunque ambas motivaciones (intrínseca y extrínseca) coexistirán en cualquier carrera artística, lo importante es mantener un equilibrio que nos permita continuar, incluso cuando el camino se vuelva complicado.
Sin embargo, algunos factores pueden reducir la motivación, y es útil reconocerlos para saber cómo enfrentarlos:
- Falta de interés por la actividad: Cuando el esfuerzo no parece compensar los beneficios, puede ser útil buscar nuevas maneras de conectar con el arte, como explorar géneros diferentes o establecer metas más concretas.
- Falta de autoconfianza: Aunque los recursos del intérprete sean adecuados, la autoconfianza puede verse afectada. Asegurarse de celebrar los pequeños logros y pedir feedback positivo puede ayudar a mejorarla.
- Desánimo: Si la percepción de los resultados es negativa, es fácil desmotivarse. En estos casos, centrarse en el proceso más que en los resultados inmediatos puede ser la clave para mantenerse motivado.
- Agotamiento psicológico: La alta exigencia, tanto personal como externa, puede generar agotamiento mental. Establecer tiempos de descanso y desarrollar rutinas de autocuidado son esenciales para evitar el burnout.
Reflexión final: El arte, una carrera de fondo
Al final, la motivación es lo que nos impulsa a seguir adelante, pero entender qué la alimenta es lo que nos permite mantenernos en el camino correcto. Desarrollar una motivación intrínseca fuerte, acompañada de una reflexión constante sobre nuestros objetivos, nos ayudará a alcanzar nuestras metas sin perder el disfrute en el proceso.
Bibliografía
López de la Llave Rodríguez, Andrés, Pérez-Llantada Rueda, Mª Carmen (2021). Psicología y Artes Escénicas. Dykinson
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